
Mide 1,50m., pudiendo fecharse hacia 1812-15. Fue donada a la comunidad por doña Francisca Lorenza de Segovia, a fin de que recibiera culto público. Durante las cantonales del periodo de la exclaustración, la efigie estubo a punto de ser quemada, cuando los insurgentes se apoderaron del convento, salvandose gracias a la gestión de uno de los frailes. La apetecieron sin resultado algunas cofradías.

Por su extraordinaria hermosura y perfección, figura entre las Dolorosas sin paso de palio que cabe admirar en los templos de nuestra ciudad. En 1980 estrenó nueva diadema y puñal en metal sobredorado, teniendo un manto de camarin bordado y otro de brocado antiguo. Se venera en una hornacina de la cabecera de la nave del Evangelio.
1 comentarios:
Me parece muy interesante este blog. Le animo a que siga incluyendo otras nuevas entradas. Si me lo permite, aquí va una ayuda: las imágenes titulares de la Escuela de Cristo del barrio de Santa Cruz, así como otras maravillas que se conservan en ese desconocido Oratorio.
Hay mucho por descubrir...
Cordialmente. Víctor MB
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